Viernes, 24 de Abril, 2020

Los cinco minutos del Espíritu Santo

Viernes, 24 de Abril, 2020

Quisiéramos vivir con más profundidad, ser personas más espirituales, realmente transformados por el Espíritu Santo. Pero no vemos grandes cambios en nuestra vida.
Si nos miramos a nosotros mismos con sinceridad podremos descubrir que en nuestro interior no está la profundidad que deseamos. Allí también hay límites e incoherencias. Posiblemente encontremos mucho egoísmo allí adentro, y lo que llamamos "amor al prójimo" quizás sea sólo una necesidad de satisfacciones afectivas, quizás sea sólo una forma de egoísmo, de estar encerrados en nuestras propias necesidades y de buscar a los demás sólo para que nos hagan sentir bien. Por eso parece que ese amor se acaba cuando los demás contradicen nuestros proyectos, cuando no nos dan la razón, no nos elogian, o no dicen lo que nos interesa escuchar.
Entonces, la incoherencia y el vacío también están dentro de nosotros mismos.
Por eso, cuando buscamos la soledad y nos encontramos con nosotros mismos a veces sólo estamos escarbando en el vacío. Porque nuestra interioridad sólo tiene vida y hermosura si allí está presente el Espíritu Santo, y si nos dejamos cambiar por él.
Sin esa luz del Espíritu Santo, terminamos confundiendo a Dios con nuestros pensamientos, con nuestra confusión mental, con nuestros sentimientos tan cambiantes. Y Dios es mucho más que todo eso, mucho más.
                         ✨🕊️✨

1 comentario:

  1. Buenos días los 5 min del Espíritu Santo Mayo 2, 2020.
    El fuego del Espíritu Santo puede quemar y sanar los malos recuerdos que a veces nos atormentan. Veamos algunos ejemplos:
    Pueden ser momentos de soledad o de abandono en Ia infancia, haber sido insultado, ignorado o despreciado; puede ser falta de cariño de los padres, desprecios y celos de los hermanos o compañeros, momentos de vergüenza, experiencias sexuales molestas o incomodas forzadas, haber sido rechazado por alguien que yo amaba, sufrimientos por no tener cosas que los otros tenían, accidentes, muertes de seres queridos, sustos, enfermedades dolorosas, prolongadas o repetidas. fracasos, etc.
    Ahora hagamos una pequeña oración para sanar nuestros recuerdos enfermizos:
    "Ven Espíritu Santo, aquí estoy, con todo mi pasado dentro de mí, para pedirte Ia paz. Mira Señor que las cosas que he vivido están lastimándome por dentro. Mira esas angustias y dolores que aparecen a causa de ese pasado que no me deja ser feliz.
    Ven, Espíritu Santo, a invadir todo mi pasado para transfigurarlo y renovarlo. Pasa por todo mi ser iluminando, sanando y liberando.
    Toca todos mis recuerdos y cura todo el dolor y Ia· inquietud que producen en mi existencia. Pasa, Espíritu de amor, y sáname por todos los momentos tristes y dolorosos, por aquellos días en que no me sentí amado, o fui despreciado, maltratado, lastimado, utilizado, calumniado, olvidado, ignorado. Cura mis recuerdos.
    Pasa con tu amor y restaura todo Ia que se ha dañado en mi corazón. Cura mi interior y mi cuerpo por todas las malas experiencias que viví. Deja sólo tu inmensa paz y tu ternura.
    Como si fuera una herida que se cierra y desaparece, así se sanará todo mi ser de esos recuerdos. Y aquello que me hizo sufrir ya no existe. Pasa Espíritu Santo, alivia, cicatriza, restaura. Ven pronto Te anhelo, Te amo y Te adoro Amen."

    ResponderBorrar